Gracias Dios por la familia que nos prestas. Gracias por permitirnos ejercer el labor de papá o mamá. Gracias por movernos a la oración.
Esta semana te agradecemos por escuchar nuestras oraciones y obrar, sea que ya hayamos visto la respuesta de nuestra oración y esperemos en fe tu favor.
Vamos delate tuyo, Jesucristo, pidiendo en favor de nuestros hijos, solicitamos madurez espiritual en sus vidas. Dales un corazón para entender y notar que este mundo es pasajero. Incomódalos al ritmo de este mundo y no tengan una mentalidad conformista, sino que tengan deseo de cambiar su manera de ser y de pensar de acuerdo a la Vida Eterna que tu has comprado para nosotros. En esta nueva manera de ser y pensar, muéstrales cuál es tu voluntad: lo bueno, lo agradable y lo perfecto.
Gracias por escuchar nuestras oraciones. Gracias por tu respuesta. Te amamos, te bendecimos y damos gloria.
En el poderoso nombre de Jesucristo. Amén.
No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
Romanos 12.2