Gracias Señor Jesucristo por un nuevo mes que nos concedes vivir. Alabamos tu nombre Santo, te reconocemos como nuestro protector, nuestro hacedor, Dios soberano y sabio. Anhelamos estar conscientes en todo momento de tus virtudes, muéstranos quién eres para desarrollar valor.
Esta semana venimos a Ti buscando valor, has revelado en tu Palabra que tus planes para nuestra vida y la de nuestra familia son planes de bien. Confesamos que en ocasiones el miedo viene a nuestro pensamiento y en lugar de recordar tus promesas nos enfocamos en las circunstancias que nos rodean. Tu nos diseñaste con emociones y el miedo es una de ellas, permite que la usemos para bendición y no caer en el desánimo o la depresión, sino sea usada para recordar que dependemos de Ti, que tienes ese plan de bendición para tus hijos, que eres Dios bondadoso y usas nuestra debilidad para ser fuerte en nosotros.
Clamamos a Ti por quienes están paralizados por el miedo, anímanos a darles una Palabra de aliento basada en tu Palabra. Guía nuestros pensamientos hacia tu verdad, hacia la paz y la fe.
Oramos confiados en que tu obras y escuchas nuestro clamor. Gloria a ti, Señor. Bendito sea tu nombre Jesucristo. Amén.
Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.
Jeremías 29.11
Corazón de Mamá 