Notas sobre la salud emocional

Por Angélica Yano

MANEJO DE EMOCIONES

La inteligencia emocional implica la habilidad para percibir y valorar con exactitud la emoción; desarrollar la inteligencia emocional desde los primeros años de nuestra vida es esencial para poder tomar conciencia de las propias emociones y comprender también los sentimientos de los demás. Esto ayuda a que los niños y niñas se conviertan en individuos social y emocionalmente competentes.

Enseña a tus hijos a Manejar adecuadamente sus emociones.

Que identifique sus puntos fuertes y débiles y trabaje para mejorarlos.
Motívalo a alcanzar metas y resolver problemas de forma responsable y efectiva.
Enseña a respetar a los otros, empatizar y apreciar la diversidad.
Instruye cómo Cuidar su mente. Romanos 12.2
Llevar los pensamientos a Dios 2 Corintios 10.5
Practiquen la oración con gratitud 1 Tesalonicenses 5.16-18

Humanidades Sociología Ana Gonzales Menendez

Manejando las emociones a través del lente bíblico by Alejandra Minton

ESTRATEGIAS PARA VOLVER LA CALMA

Algunas estrategias para controlar la impulsividad y aprender a calmar las emociones.

Identifica las señales de alarma.
Respira y cuenta hasta 10.
Toma distancia por un momento de la situación.
Desconecta tu cerebro, piensa en otra cosa.
Analiza tu situación de manera objetiva.
Cuida tu alimentación, puede ayudarte a controlar tus nervios.
Busca un lugar tranquilo, la naturaleza puede ser tu gran aliada
Pide a Dios la calma. Filipenses 4.7

BENEFICIOS SALUD EMOCIONAL

8 beneficios de una buena gestión emocional en los niños.

Desarrolla una actitud positiva ante la vida, ante lo que nos rodea.
La alegría facilitará un acercamiento a las otras personas.
Genera una sana autoestima (una actitud positiva ante nosotros mismos), lo que nos ayuda a aceptarnos y querernos como somos, únicos, con virtudes y defectos.
Motiva para el cambio y los nuevos retos.
Aumenta el nivel de tolerancia a las frustraciones.
Ayuda a tomar decisiones y resolver problemas y conflictos.
Aumenta nuestra capacidad para disfrutar de los acontecimientos.
Facilita el proceso de aprendizaje y nos llena de energía y curiosidad.